sábado, 14 de noviembre de 2009

VALORACIÓN


El hombre muchas veces se pregunta por que vive. La incógnita mas indescifrable de las incógnitas parece cubrir la superficie de su cerebro cada vez que se realiza esta pregunta. La espera de respuestas se prolonga y un inmenso dilema crece como un monstruo dentro de su cabeza. El hombre intenta olvidar la situación, pues se ve indefenso, perdido, desamparado; se ve muy confundido al tratar de encontrar una respuesta a su eterna pregunta. La incertidumbre que genera su existencia lo marea como una ostra abatida por las olas de un mar embravecido y perdido en la confusión, parece olvidar todos los motivos que alguna vez lo hicieron disfrutar de su vida. En tal situación el hombre llega a preguntarse: ¿realmente vale la pena vivir?
De pronto queda inmóvil, no emite movimientos y un gran enigma lo cubre con la mas oscura de las capas. Debajo de ella mira hacia el exterior a través de una delgada lámina traslúcida. Refugiado en ese lugar, ve un panorama que no lo conforma y resignado de encontar alguna respuesta, se entrega a la vida sin mas preámbulos. Desciende y sube, llora y ríe, vive y muere, mientras el tiempo va transcurriendo. Así sus días van acumulándose sobre su espalda sin ofrecerle la posibilidad de valorar cada uno de ellos. Mientras transita por la vida cumpliendo con su rutina, la sombra que proyecta su trayecto parece agigantarse y opacar todo el brillo de los dias vividos. De esta manera, el hombre parece vivir por el simple hecho de vivir, por el simple hecho de ser uno mas sobre esta tierra que dice, hace y sufre lo que los demas.
Resulta ser que el hombre es un inmenso ignorante, un gran estúpido que deja seducirse por el ritmo que lo embiste. Jamas intenta dar ejemplos de individualidad, jamas da una muestra clara de su ideología. Hoy el mundo sigue dando vueltas y al hombre ya no le importa si lo hace con mayor o menor velocidad que ayer; mientras su asiento permanezca en su lugar, que los demas mueran de rodillas.
Me resulta increible observar el comportamiento del hombre. Es muy sorprendente pensar en lo poco que valora la vida. ¿Como es posible que mantengamos vigente la mismísima moralidad mediocre luego del paso de los años? ¿Como es posible que no nos sorprendan los hechos que día a día nos aturden? Es una alerta, un gran llamado de atención lo que nos sucede hoy en dia; en el siglo XXI, con todas las paginas de la historia. Pareciera que el grado de recapacitacion solo nos dura unos escasos minutos. Pues intentamos mejorar las cosas mientras las tormentas nos golpean, pero que rápido olvidamos aquella actitud revolucionaria; luego de que el sol aparece, reímos a carcajadas bajo su brillo y cuidamos el asiento que nos han concedido. Cuidamos nuestro lugar nuevamente, lo cuidamos por hoy y por siempre. Lo cuidamos de todo acontecimiento evitando que algo pueda mancharlo.
Estamos muy equivocados queridos humanos, si que estamos equivocados. La vida no es un puñado de convenciones que debemos respetar, no es un compotera donde debemos habitar por siempre, no es una simple receta que debe seguir pasos relativos. La vida es mas que todo eso; es un desparpajo de emociones al aire, un sin fin de ideas planeadas a medias, una literal exposicion improvisada al baile del viento, una lotería. La vida es todo eso y mucho mas, y parece que a menudo lo olvidáramos.
Sucede frecuentemente que solo vivimos desvalorando cada momento, quitándole prestigio a las cosas. Parece ser que subestimamos nuestra existencia y que solo cuando el corazón enferma logramos recapacitar. Solo al contraer alguna enfermedad tomamos noción de lo bella que es la vida. Pues vivimos haciendo lo posible por enfermar el mundo y cuando estamos a punto de matarlo, intentamos hasta lo imposible por reanimarlo solo por unos segundos...

2 comentarios:

  1. Realmente lo senti en lo mas profundo, y sobre lo cierto que se siente el pensar esta "incógnita de la vida". Es una angustia que me invade.

    Si que hay que aprender a valorar la vida, y sobre todo a vivirla, a disfrutarla, cada paso y cada momento, no sabemos de donde venimos ni a donde vamos, ni como estamos aca, ni porque, absolutamente nada de nada podemos saber. La única certeza que podemos tener es que estamos viviendo en este mundo, y sera por algo o no, es una oportunidad para aprender y VIVIR, por mas común que suene, no lo es tanto creo yo. En la infinidad del tiempo la vida particular, no se, pero es muy extraño. Mejor no pensarlo tanto, y aprovechar este camino, que no tenemos idea, cuanto puede durar.

    Te felicito Ema, te veo muy alto, ja, que sigas así, es lo tuyo. Beso

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  2. Ema, la vida bella, más bella que el sol que ilumina, que los cantos de las aves.La vida bella merece alabanzas.He aprendido a beber cada instante como lo mas maravilloso de esta vida

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